Un día después del faltazo del Presidente al acto de la UIA, la gobernadora visitó a los empresarios provinciales; habló de generar «consensos» y presentó facilidades de ARBA
No fue algo buscado, pero dejó expuesta la diferenciación. En medio de la crisis económica y de las fuertes críticas del sector a la política económica de Mauricio Macri, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, encabezó un acto con los industriales de la provincia, mientras que un día antes el presidente Mauricio Macri los evitó.
Ya no hay un trabajo común. Vidal tiene su propia agenda. «Ella no tiene problemas de ir a ningún lado ni tiene las puertas cerradas en ningún lado. Tenemos la libertad de ir a todos lados», resaltaron cerca de la mandataria, que habló ante unos 500 empresarios, que la aplaudieron durante gran parte de su exposición.
La gobernadora, que participó del Congreso Industrial Pyme, que organizó la Unión de Industriales de la Provincia de Buenos Aires (Uipba), anunció un «plan de pago nuevo para todas las deudas impositivas de todos los impuestos».
Y agregó: «Y eso incluye al sector productivo: son planes de pago para contribuyentes que tengan instancias prejudiciales o judiciales que refinancian la deuda a 60 meses».
En coincidencia con el discurso que bajó la Casa Rosada, Vidal también se refirió a la necesidad de generar consensos y terminar con la grieta.
«Si hay algo que esta crisis nos demuestra a los argentinos y a los bonaerenses es que no puede haber modelo de desarrollo, de apoyo a los que producen, modelo que ponga como eje el trabajo con grietas. Necesitamos un camino de consenso juntos. Pero eso no depende de un presidente o un gobernador. Depende de todos nosotros. Eso es una responsabilidad de todos, de quienes hoy gobernamos, de quienes sean elegidos después de este proceso electoral», sostuvo la gobernadora, que en las PASO quedó 17 puntos debajo de Axel Kicillof.
«Si con todas las dificultades que nos han atravesado, hay ejemplos de industrias que no se dieron por vencidas y lograron crecer, imagínense lo que podemos lograr con un camino de consenso, de diálogo honesto y de mayor grandeza», manifestó.
Los gestos de amabilidad entre Vidal y los industriales en Costa Salguero contrastaron con las críticas que recibió Macri en las últimas horas de parte del presidente de la UIA, Miguel Acevedo, quien calificó al Presidente como una «desilusión» y lo acusó de «no escuchar a la sociedad». En ese sentido, Martín Rappallini, titular de la Uipba, agradeció la presencia de Vidal.
Pese a la crisis que golpea al sector, la gobernadora destacó que «en la provincia hay más de 265.000 pymes que generan cuatro millones de puestos de trabajo, muchas de ellas instaladas en los 80 parques industriales».
Y añadió: «Si con todas las dificultades que nos han atravesado, hay ejemplos de industrias que no se dieron por vencidas y lograron crecer, imagínense lo que podemos lograr con un camino de consenso, de diálogo honesto y de mayor grandeza».
Así, Vidal volvió a tomar distancia de la Casa de Gobierno. La gobernadora, aún molesta con la estrategia electoral que definió el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y que terminó con la dura derrota del 11 de agosto, decidió que encarará la campaña en soledad. De hecho, ya dio vía libre a los candidatos de Juntos por el Cambio para entregar la boleta cortada.
El encuentro con los industriales bonaerenses se dio al mismo tiempo que varios intendentes peronistas le presentaron una carta a la gobernadora para exigir que aumente los fondos y cupos para los comedores escolares y declare la emergencia alimentaria en este territorio (ver aparte).
En La Plata todo fue sorpresa. «Ayer [por anteayer] lo habíamos hablado. Se reforzaron los envíos de alimentos a todos lados», confió uno de los hombres de consulta de la mandataria.
Según fuentes cercanas a Vidal, la movida que lideró la intendenta y candidata a vicegobernadora Verónica Magario fue «electoralista». Además, desde la provincia aseguraron que ya se aumentó en un 10 por ciento el valor que paga por cada cupo del Servicio Escolar Alimentario.
